Seis letras y un nombre.


Cariño, solo se necesita que pronuncies mi nombre. Para que se me erice la piel. Para que comience el cosquilleo. Para que se me dibuje una sonrisa en el rostro.  Solo mi nombre. Solo seis letras. O-l-i-v-i-a. Para que mi día cambie. Para que vuelvan las dudas. Para que comience a pensarte de nuevo. Solo necesitas pronunciarlo. Para que mi corazón se acelere. Para que se abran cientos de puertas. Para que regresen los recuerdos. O-l-i-v-i-a. Para que mi mundo se ponga de cabeza. Para que de repente comiencen a fluir las palabras. Para que comience a despolvar viejas canciones. Cariño, solo pronuncias mi nombre. Para que comience a sentir de nuevo. Para que me vuelva a gustar el rojo. Para que comience a extrañarte de nuevo. Mi nombre, cariño. Para querer comenzar a escribirte de nuevo. Para que pronuncie tu nombre de vuelta. Para que de pronto no haya excusas para no pensarte de nuevo.