Te vi afuera de una tienda reconocida, fumando un cigarrillo recostado del escaparate. Detrás de ti unos maniquÃes con la ropa de la semana parecÃan sonreÃr. Llevabas puesta una chaqueta negra y una expresión de angustia en el rostro. Recuerdo haber pensado que eras lo más hermoso y triste que habÃa visto jamás. Me encontré preocupándome por aquello que te causaba angustia y aun sin conocerte supe que eras especial. Me debatÃa en la esquina de la tienda contemplando si acercarme o no, pensando que quizás querÃas estar solo. No tuve que decidir, en ese momento levantaste la mirada y me viste allà en medio de la calle con una expresión de indecisión en el rostro y me preguntaste si me podÃas ayudar en algo. Yo quede muda por momentos pensando en que decir. SonreÃste de lado esperando mi respuesta. Estoy esperando a alguien te conteste. Tus ojos se volvieron tristes por un momento y dijiste en apenas un susurro yo también. Ese dÃa ninguna de las personas que esperamos llegaron y a la misma vez lo hicieron, ese dÃa nos encontramos el uno al otro. Y casi todos los dÃas paso yo por allà a la misma hora y casi siempre estas allà con el cigarrillo en la boca pero sin expresión de angustia en el rostro. Desde ese dÃa te volviste me rutina, mi cotidianidad. Ese dÃa te encontré, aun cuando no te busca y cuando menos lo esperaba.
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Awwwww. Lovely*
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