Y se dio cuenta, tarde.


Ella todavía no sabe como paso. Un día todo estaba bien, promesas hechas, planes, un futuro. Pareciera que de la noche a la mañana todo desapareció.  Recuerda aquel día en el aeropuerto cuando creyó que todo al fin podría ser posible.  Ahora se sienta en su apartamento y vuelve a revivir todo lo que paso, tratando de determinar el momento exacto en que todo cambio. Piensa si no dijo las palabras correctas, si no sintió los sentimientos correctos o si entonces fue que ella no era la correcta.  Buscando exactamente qué era lo que había hecho para que él se marchara.  Y una lagrima roda por su mejilla, no se había dado cuenta que estaba llorando. Tantos momentos, tanta esperanza, tanto amor y parece que todo se fue por la ventana igual que solía irse el humo de su cigarrillo.  Se pregunto si todo fue cierto, si todas sus palabras fueron sinceras o solo fueron palabras dichas en la emoción del momento. Quizás él creyó que eran ciertas, sin saber que no eran sinceras. Y ahora, aún cuando han pasado un mes y tres días, ella aún lo extraña. Ella aún siente su corazón latir más fuerte cada vez que alguien toca a la puerta, cada vez que el teléfono suena…siempre pensando que es él. Siempre esperando. Y por un momento culpa a su ciudad por haberlos envuelto en su magia y haberlos engañado con falsos sentimientos. Pero no, nadie tiene la culpa o quizás el tiempo, que todo lo desvela, que todo lo cura. Y entonces se dio cuenta, tarde, que quizás no fue su culpa.

2 comments

  1. Siempre digo que no somos responsables de los pensamientos de los demás. Así que lo que él haya pensado es su problema, su responsabilidad y ella aún queriendolo no iba poder cambiar eso.

    PD. Me gusto el personaje.

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  2. Muchas gracias! Su historia continua, así que pendiente.

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