Cuando parecía improbable.

3:56 a.m. Ella se encuentra sentada en una de las sillas en el aeropuerto.  Su pie se mueve de acuerdo al el ritmo de su corazón. Mira esperanzada a la salida. El reloj da las 3:57, solo ha pasado un minuto. Se pregunta porque esta tan nerviosa. Después de todo es solo él. Hacen exactamente un mes y dos días que no lo ve.  Aunque siente que la ausencia fue mucho más larga. El reloj da las 3:58, un minuto más.  Se pregunta porque la tardanza. Su corazón late un poco más rápido de lo normal.  Mira la pantalla donde están todos los vuelos, en letras grandes lee “On Time”. Se relaja un poco. El reloj da las 3:59, otro minuto más. Y ella comienza a pensar si realmente él es como le piensa o si la distancia ha cambiado algo en él.  Se transporta en el tiempo, exactamente un mes y dos días atrás, un aeropuerto un poco más grande del que se encuentra y en otra ciudad. Una escena de despedida. Te voy a extrañar susurrados. Un último abrazo.  Y la promesa de volverse a ver. Parece algo irreal que este aquí esperando para verlo. Aquel día en el aeropuerto algo dentro de ella le decía que no lo volvería a ver, cuan equivocada estaba. 4:00a.m. Lentamente comienzan a salir los pasajeros y por un segundo ella no quiere levantar la mirada. 1, 2, 3, 4…pasajeros.  Todavía no le puede ver. 5, 6, 7, pasajeros y allí esta, bulto en mano igual que como lo dejo hace un mes y dos días atrás. Ella se pone de pie y él se detiene un momento donde está, como si tampoco pudiera creerlo. 4:01, un promesa cumplida.  

5 comments

  1. Que hermoso. Al leerlo pude transportarme al lugar. Cuan parecido a la realidad es esta historia. "una promesa cumplida"

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  2. Gracias! Es una de esas historias que llegan a mi cabeza mezcladas entre la realidad, los sueños y la imaginación. *Wishful thinking* :D

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  3. Zitmarie:

    En este texto juegas con la retrospección, sugieres el tiempo como elemento crítico que hace que el lector se transporte al compás de la historia. Parece ser que el tiempo es tu arma mortal. ¡Excelente!

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